En una conferencia que impartí recientemente tuve la oportunidad de conversar con una familia empresaria de Barcelona sobre la cultura organizacional en las empresas familiares. Este es un tema que encuentro muy interesante y relevante para la continuidad de las empresas familiares, ya que afecta directamente la manera de trabajar en el seno del negocio y, por ende, sus probabilidades de éxito.
Cuando una empresa familiar dispone de una cultura organizacional sana, competente y confiable, donde los directivos saben escuchar y crear relaciones basadas en la confianza, tiene una ventaja competitiva muy importante. La compañía tendrá más facilidad para atraer y retener el talento que sus competidores y, además, será percibida de forma distinta, con lo que conseguirá diferenciarse de estos.
¿Qué es la cultura organizacional?
Empezaremos este artículo con algunas definiciones de cultura organizacional. Podemos decir que es la visión compartida de la empresa que fundamenta la identidad de las personas como miembros de la misma y que guía sus decisiones, especialmente en situaciones nuevas. Se considera que tales comportamientos y modos de relacionarse, que forman parte de la cultura organizacional y que se transmiten a quiénes entran nuevos en la organización, conducirán al éxito de la compañía.
Otra definición, según Desphande y Webster (1989), es la siguiente: Cultura corporativa es “el modelo de valores y creencias compartidas que dan a los miembros de una organización significado y les proveen las reglas de su comportamiento en la organización”.
Son muchos los factores que pueden condicionar la cultura organizacional de una empresa como la nacionalidad y el país de origen. No es lo mismo la cultura de una empresa familiar catalana o española que la de una empresa germánica o japonesa, por ejemplo. Ahora bien, en este artículo nos centraremos en aquellos rasgos distintivos de la cultura organizacional de las empresas familiares, que son sustancialmente diferentes a los de las compañías no familiares.
¿Qué diferencia la cultura organizacional en las empresas familiares?
En las empresas familiares, la cultura está formada por todos aquellos comportamientos, valores y creencias con que se identifican las personas de la familia empresaria y se encuentra muy marcada por la figura del fundador y otros líderes familiares sucesores. En efecto, la cultura organizacional en las empresas familiares está íntimamente relacionada con la personalidad del fundador o fundadores del negocio, con la de los propietarios actuales del mismo (la familia) y con los estilos de liderazgo que imperan en el negocio.
En las empresas familiares, la cultura organizacional se transmite de generación en generación por quienes dirigen la empresa y por la familia misma, principalmente a través del ejemplo y de comportamientos y costumbres, tanto en el trabajo como con los hábitos familiares. Sin embargo, esta cultura organizacional evoluciona con el paso del tiempo. Se crea, se mantiene y se transforma a través de las relaciones y va evolucionando con el paso de las generaciones, aunque es habitual mantener los valores esenciales de la familia como la constancia, la honradez, la cultura de trabajo o la unidad familiar.
Además, la voluntad de dar continuidad al negocio, la historia de esfuerzo y superación de la familia empresaria, la mentalidad de planificación a largo plazo, y el orgullo de pertenencia a la empresa familiar influyen muy positivamente en la cultura organizacional de la compañía. Estos aspectos aportan seguridad y generan la certeza en el equipo de que están contribuyendo en una empresa en crecimiento, sólida y con futuro.
Internamente, las empresas familiares suelen estar orientadas hacia las personas. El trato entre empleados y directivos acostumbra a ser cercano y con una gran preocupación por el bienestar del equipo. Por otro lado, la familia suele valorar especialmente como una muestra de lealtad aquellos trabajadores que llevan mucho tiempo en la empresa. Todos estos aspectos que hemos comentado hasta ahora facilitan la motivación, la unidad, la cooperación y el compromiso del equipo con la empresa familiar.
Por último, la cultura corporativa de los negocios familiares generalmente está marcada por la vocación de servicio y de atención al cliente que confía en nosotros. La seriedad y la puntualidad, así como una adaptación constante a las necesidades de la sociedad son otros rasgos distintivos de la cultura organizacional en las empresas familiares.
2 respuestas a “¿Por qué es diferente la cultura organizacional de las empresas familiares?”
[…] de los años, ha logrado introducirse en el mercado y posicionarse en el mismo. Por todo ello, la cultura organizacional de la empresa familiar suele reflejar la forma de pensar y de ser del […]
[…] generación decidió crearla. A partir de su fundación, el propósito ha impregnado y reforzado la cultura y los valores de la empresa a lo largo de las generaciones. Es un intangible muy vinculado a los […]